¿Qué eficiencia del motor es mejor? Conoce los diferentes tipos
La eficiencia del motor es la relación directa entre la potencia mecánica y la potencia de propulsión. ¿Qué eficiencia del motor es mejor? Cada tipo de motor está pensado para tener una eficiencia concreta.
Seguramente no te has parado nunca a pensar en qué es la eficiencia del motor de tu vehículo. Simplemente te sientas en el asiento del conductor, metes la llave en el contacto y comienzas tu aventura al volante.
Sin embargo, hay ciertos aspectos técnicos del vehículo que deberían interesarte para entender el funcionamiento de un vehículo. Entre ellos, esa eficiencia del motor que hemos conectado, que está directamente relacionado con el rendimiento del vehículo.
¿Qué es la eficiencia del motor?
La eficiencia del motor es la relación directa entre la potencia mecánica y la potencia de propulsión. En términos generales y siendo muy técnicos. Para que todo el mundo lo entienda, es la capacidad del motor de convertir la energía proporcionada por la gasolina o el diésel en movimiento.
Es decir, cuando enciendes el motor con la llave de contacto, la eficiencia es su capacidad de arranque en función de la energía de combustible que se convierte en potencia de movimiento. Es un término que está relacionado completamente con toda la mecánica del vehículo. De hecho, los fabricantes tienen muy presentes esta eficiencia del vehículo y buscan que sea cada vez mejor.
Con un motor más eficiente, no solo mejora el rendimiento del motor. También tiene relación con la emisión de gases contaminantes a la atmósfera. Si aumenta la eficiencia del motor, se reducen los gases contaminantes derivados de la combustión del carburante.
Eficiencia del motor eléctrico
Con la presencia de los vehículos eléctricos en el parque automovilístico de todo el mundo, la eficiencia cobra un nuevo sentido. Si bien se entiende de la misma manera con la relación entre la potencia mecánica y la potencia eléctrica, en los motores eléctricos, la eficiencia tiene más importancia de la que crees.
Si bien la eficiencia de los motores de combustión va a depender de las propiedades del carburante, en los motores eléctricos no es así. La eficiencia de un motor eléctrico suele estar entorno al 75% del total de energía derivada de la carga.
Para entender la eficiencia de un motor eléctrico, hay que tener en cuenta el voltaje y el suministro eléctrico del motor y la velocidad y potencia a la que se mueve el vehículo.
¿Qué eficiencia del motor es mejor?
Ahora que sabemos que la eficiencia del motor no es igual y que depende de si tienes un vehículo de gasolina, de diésel o eléctrico, llega el momento de comparar unos con otros. Cada tipo de motor está pensado para tener una eficiencia concreta.
- Eficiencia de los motores de gasolina. Los motores de gasolina están pensados para una eficiencia entre el 20% y el 30% del total.
- Eficiencia de los motores diésel. La eficiencia de un vehículo con motor diésel suele estar entre el 30% y el 45%.
- Eficiencia de los motores eléctricos. En este caso, los vehículos eléctricos quedan por encima, con un rendimiento mínimo del 75%, y en ocasiones hasta el 95% del total.
Conviene destacar que no hay que confundir la eficiencia mecánica con la eficiencia económica. Si bien es cierto que los motores eléctricos son los más eficientes, técnicamente hablando, el precio de estos vehículos es superior al del resto. Esto ocurre en la actualidad, pero se espera que los tornos giren en el futuro, y en esto están trabajando los fabricantes de vehículos.
También hay que tener en cuenta que los vehículos antiguos no pueden compararse con los de última generación, independientemente de su tipo de combustible o energía utilizada para su movimiento. Un vehículo de 20 años no va a tener la misma eficiencia energética que uno del último año.
¿Importa la eficiencia del motor en la ITV?
Si te preocupa este aspecto a la hora de pasar tu próxima ITV, tranquilo. Las pruebas de la inspección técnica no miden esta eficiencia como algo imprescindible para que los resultados de tu ITV sean favorables.
Lo único que tendrás que tener en mente es que, dependiendo del tipo de vehículo que tengas, haremos unas pruebas u otras. Es decir, si tienes un vehículo de motor eléctrico, tendrás que pedir cita previa ITV para pasar la ITV de coches eléctricos.
Lo mismo si tienes un diésel, ya que las pruebas de un coche diésel en la ITV van a ser diferentes a las de un vehículo de combustión de gasolina. Sin embargo, no tenemos en cuenta ese porcentaje de eficiencia mecánica y eléctrica en las pruebas, así que no te preocupes.
No obstante, si tienes dudas o necesitas respuesta a alguna de tus preguntas, puedes ponerte en contacto con nosotros antes de pedir cita previa. Te intentaremos ayudar en todo lo que esté en nuestra mano antes de verte en alguno de nuestros centros repartidos por España. Recuerda que tras la crisis del COVID-19, tendrás que pedir cita previa para que podamos atenderte y venir a pasar tu ITV en tiempos de Coronavirus con toda la comodidad y seguridad.