Carrocería ITV. Defectos de carrocería por los que no pasarías la ITV
¿Sabías que un pequeño desperfecto en la carrocería del coche puede ser suficiente para no superar la ITV? Aunque muchas veces se consideran problemas puramente estéticos, algunos fallos en la carrocería del vehículo pueden afectar directamente a la seguridad y suponer un motivo de rechazo durante la inspección técnica.
¿Sabías que un pequeño desperfecto en la carrocería del coche puede ser suficiente para no superar la ITV? Aunque muchas veces se consideran problemas puramente estéticos, algunos fallos en la carrocería del vehículo pueden afectar directamente a la seguridad y suponer un motivo de rechazo durante la inspección técnica. Es muy importante conocer cuáles son esos defectos críticos y cómo puedes detectarlos y prevenirlos.
Aumento de rechazos por defectos en la carrocería del vehículo
En los últimos cinco años, los rechazos por defectos graves en la carrocería han aumentado un 30%, según un estudio de CertifiedFirst, red especializada en chapa y pintura. Esta cifra refleja una realidad que a menudo se pasa por alto: el estado de la carrocería no solo influye en la estética del coche, sino también en la seguridad vial.
Recomendamos prestar atención al estado exterior del vehículo antes de acudir a la inspección. Revisa los elementos clave de la carrocería del coche y asegúrate de que todo esté en correcto estado para evitar una inspección desfavorable.
¿Qué se revisa en la ITV relacionado con la carrocería?
La inspección técnica de vehículos incluye una revisión exhaustiva de numerosos elementos, y la carrocería del vehículo es uno de los puntos clave. Algunos de los aspectos que se controlan son:
- Estado de los paragolpes y parachoques
- Retrovisores y lunas (visibilidad, fijación y estado)
- Cristales del vehículo (sin fisuras ni roturas que impidan la visibilidad)
- Molduras y elementos externos sujetos al vehículo
- Presencia de óxidos o corrosión
- Puertas, capós y maleteros (deben cerrar correctamente y sin holguras)
Carrocería del coche: defectos que suponen un rechazo en la ITV
Algunos defectos leves en la carrocería pueden no impedir pasar la ITV, aunque se indiquen como observaciones. Sin embargo, hay otros que sí suponen un defecto grave y motivo de rechazo. Estos son los más comunes:
Presencia de óxido, perforaciones o deterioro estructural
El óxido superficial no siempre es motivo de rechazo, pero cuando afecta zonas estructurales del vehículo o compromete su integridad, puede convertirse en un defecto grave. También se consideran graves las perforaciones visibles, sobre todo si afectan al bastidor o zonas próximas a los anclajes de seguridad.
Aristas vivas o cortantes
Golpes o desprendimientos de piezas pueden dejar bordes afilados o cortantes, lo que representa un riesgo tanto para peatones como para otros vehículos. En la ITV, este tipo de defecto se considera grave por su peligrosidad.
Fisuras en el parabrisas dentro del campo de visión del conductor
Las grietas o fisuras en el parabrisas, especialmente si están situadas en la zona de visión directa del conductor, son causa directa de rechazo. Afectan a la visibilidad y suponen un riesgo de rotura total ante impactos o vibraciones.
Retrovisores rotos o mal fijados
Los retrovisores son imprescindibles para una conducción segura. Si están sueltos, dañados o no se ajustan correctamente, pueden provocar una inspección desfavorable.
Fijación defectuosa de paragolpes o molduras
Paragolpes mal sujetos, molduras despegadas o elementos que se mueven al tacto indican una fijación incorrecta. Estos desperfectos pueden convertirse en peligros en caso de desprendimiento durante la circulación.
¿Cómo evitar estos fallos antes de la ITV?
Una revisión visual periódica del estado exterior del vehículo puede ayudarte a detectar posibles problemas a tiempo. Aquí tienes algunos consejos para evitar defectos en la carrocería del coche antes de acudir a la ITV:
- Limpia el coche antes de la inspección: La suciedad puede ocultar desperfectos y dar una impresión de descuido general.
- Revisa espejos y lunas: Asegúrate de que no presenten grietas, fisuras o elementos sueltos.
- Comprueba puertas y ventanillas: Deben abrir y cerrar con normalidad, sin holguras ni bloqueos.
- Examina la carrocería en busca de óxido o golpes: Presta especial atención a los bajos, pasos de rueda y zonas cercanas a los anclajes de los cinturones de seguridad.
- Sujeción de elementos exteriores: Comprueba que molduras, alerones, portaequipajes o embellecedores estén bien sujetos y no representen un peligro.
¿Qué hacer si detectas un defecto?
Si localizas algún daño que pueda comprometer el resultado de la inspección, y como no se puede circular sin ITV, lo más recomendable es acudir a un taller especializado para su reparación. Algunos problemas como pequeños arañazos o abolladuras pueden no representar un problema, pero si hay dudas sobre la gravedad del defecto, es mejor corregirlo antes de la inspección.
Además, si has sufrido recientemente un accidente, por leve que haya sido, asegúrate de revisar bien toda la carrocería del vehículo. A veces los daños estructurales no son visibles a simple vista pero sí detectables durante la inspección técnica.
El estado de la carrocería del coche va más allá de la estética: tiene un impacto directo en la seguridad del vehículo y puede marcar la diferencia entre pasar o no la ITV. Los defectos como óxido, aristas vivas, elementos mal sujetos o fisuras en el parabrisas son motivos frecuentes de rechazo. Por eso, una revisión previa y periódica es fundamental.
¿Te toca pasar la ITV? Revisa los defectos de carrocería por los que no pasarías la ITV y evita sorpresas. Si tienes dudas sobre el estado de tu vehículo, consulta nuestra sección de consejos ITV o pide cita en uno de nuestros centros. Conduce con seguridad y asegúrate de que tu coche cumple con todos los requisitos técnicos.