Gafas para conducir: ¿Qué debemos saber?
Son muchas las personas que necesitan gafas para conducir, siendo esta una alternativa muy útil si tenemos en cuenta que la falta de claridad de visión está directamente relacionada con el aumento de probabilidades de sufrir un accidente de tráfico.
A través de este artículo conoceremos una serie de aspectos relacionados con el uso de gafas para conducir, así como también conoceremos las normas que aplica la DGT respecto al uso de las mismas en la conducción.
Consejos para elegir gafas para conducir
Si bien es cierto que la elección de unas gafas para conducir dependerá del estilo y preferencias de cada persona, es importante considerar una serie de recomendaciones que nos ayudarán a escoger una opción idónea para conducir.
Por ejemplo, es importante evitar aquellas gafas que cuenten con los extremos muy gruesos, así como también se desaconseja el uso de gafas de pasta anchas, mientras que la opción más recomendada es apostar por aquellos modelos que cuenten con los laterales más delgados.
De esta manera, tendremos la posibilidad de ver a través de los marcos, lo que se traduce en una mejora de la visión periférica.
Además, es imprescindible escoger un modelo de gafas para conducir que cuenten con protección antirreflejo, que nos serán muy útiles a la hora de evitar los habituales deslumbramientos nocturnos en la carretera. Para ello, tenemos gafas específicas que reducen el brillo y mejoran el contraste. Consigue más información sobre gafas para conducir de noche en nuestro artículo del blog.
¿Qué consejos nos recomienda la DGT?
Desde la DGT son conscientes de que son muchas las personas que usan gafas para conducir, de modo que no es de extrañar que hayan elaborado un listado de consejos específicos para este tipo de conductores.
En primer lugar, recomiendan siempre el uso de gafas o lentes de contacto, puesto que estamos ante una solución que nos permitirá mejorar la visión durante la conducción.
Por otra parte, en caso de necesitar las populares gafas “de cerca”, se aconseja utilizar un modelo de lentes progresivas, ya que nos permitirán ver mejor la información del tablero de instrumentos de un vehículo.
El uso de gafas de sol, tanto graduadas como sin graduar, es una opción altamente recomendable si tenemos en cuenta que evitan el exceso de luz, siendo una solución especialmente indicada al circular durante la salida o puesta del sol.
En caso de que tengamos las capacidades de percepción visual reducidas es necesario aclarar que tendremos que circular a una velocidad no muy elevada, puesto que una velocidad excesiva implica que el campo de visión se estrecha de forma natural.
El consumo de ciertos fármacos puede afectar a la visión. Por esta razón, es conveniente seguir la recomendación del médico y, siempre que sea posible, evitar la conducción nocturna, dado que la visibilidad será inferior en comparación con la circulación con luz natural.
Asimismo, una de las particularidades de las personas que necesitan gafas para conducir es que acuden regularmente al oftalmólogo. En estas exploraciones es muy común que se dilaten las pupilas, lo que significa que no se recomienda conducir hasta que no desaparezcan los efectos de la medicación que dilata las pupilas.
Finalmente, no podemos concluir este listado de consejos sin destacar que, en caso de tener problemas de visión, es preferible circular por aquellas rutas que sean conocidas por el conductor, así como también por aquellas que tengan poco tráfico.
¿Cuáles son las principales razones por las que se usan gafas para conducir?
La principal causa que obliga a muchos usuarios usar gafas para conducir se debe a la miopía, que se caracteriza por tener problemas de visión en distancias largas, lo que impide ver correctamente la información que aparece en las señales. Además, esta situación se agrava especialmente en la conducción nocturna.
Otra situación habitual, aunque no afecta tanto en la conducción, es conocida como hipermetropía, cuya principal particularidad es la dificultad que tienen estos pacientes para enfocar los objetos desde una corta distancia.
Destacamos también los escotomas, las cataratas o el glaucoma, que origina una visión de tubo y va reduciendo el campo visual de forma progresiva como otra de las situaciones más habituales que hacen posible el uso de gafas para conducir.
¿Es obligatorio llevar unas gafas de repuesto?
Una de las dudas más habituales entre aquellas personas que requieren el uso de gafas de conducir es saber si, por ley, es obligatorio llevar unas gafas de repuesto en el vehículo. Pues bien, la DGT no nos obliga a ello, aunque sí que estamos ante una alternativa recomendable.
En definitiva, el uso de gafas para conducir se ha convertido en una situación muy común dado que cada vez son más las personas que tienen problemas de visión. Sin duda, mejorar la visión durante la conducción es una de las mejores alternativas que tenemos a la hora de reducir las posibilidades de sufrir un percance en la carretera.
La correcta visibilidad es uno de los factores más importantes a la hora de conducir. Descubre los peligros del efecto túnel, otra de las situaciones relacionadas con la visibilidad que debemos tener muy en cuenta a la hora de ponernos al volante.