Distancia de seguridad en carretera: todo lo que debes saber

La distancia de seguridad entre vehículos es uno de los temas que más controversia generan. En muchas ocasiones se marcan incluso las separaciones en el suelo, pero siguen ocurriendo accidentes por no respetar esta distancia mínima. ¿Qué podemos hacer?

Qué es la distancia de seguridad

En primer lugar, debemos saber qué se entiende por distancia de seguridad. Este término hace referencia a una distancia mínima que debe haber entre dos vehículos que están circulando. Mantener una correcta distancia de seguridad puede ayudarte a evitar un accidente ya que te ofrece un mayor tiempo de reacción para evitar una colisión con el vehículo que circula delante de ti.

El Reglamento General de Circulación explica que “todo conductor de un vehículo que circule detrás de otro deberá dejar entre ambos un espacio libre que le permita detenerse en caso de frenado brusco, sin colisionar con él, teniendo en cuenta especialmente la velocidad, las condiciones de adherencia y frenado”. Además, esta distancia debe permitir que un tercer vehículo nos adelante y se ubique entre nosotros y el vehículo que va delante en condiciones de seguridad.

Esto está claro, pero ¿cómo podemos saber si estamos o no cumpliendo con esta distancia?

La DGT ha estipulado que un conductor puede calcular esa distancia mínima de seguridad teniendo en cuenta la regla de los dos segundos. Esto quiere decir, que puedes fijarte en un elemento como un semáforo, un puente o una intersección y comprobar que desde que ha pasado el vehículo anterior hasta que lo hace el tuyo pasan dos segundos.

De esta manera, podrás tener la tranquilidad de que estás manteniendo la distancia mínima de seguridad. Pero ten en cuenta eso, que es mínima. Siempre puedes aumentarla si lo consideras oportuno.

Además, esta distancia varía dependiendo de las circunstancias en las que se circule. Por ejemplo, si lo haces por una calzada que tiene señalización de obras, debes ser prudente y aumentarla. Pero también en el caso de que las condiciones climatológicas sean adversas, con lluvias, nieve o fuertes rachas de viento.

Esta distancia debe pasar de los dos segundos a los 6 segundos en aquellos casos en los que se conduzca un vehículo cuya masa máxima autorizada sea superior a 3500 kilogramos, ya que la distancia de frenado aumenta en función del peso.

¿Por qué es importante mantener una correcta distancia de seguridad?

Aunque no se aprecie a simple vista, en esos dos segundos se recorre una distancia considerable. Si se circula a 50 kilómetros por hora, un vehículo puede recorrer 90 metros, a 90 kilómetros por hora llega a recorrer 50 metros, y a 120 kilómetros por hora, llega a alcanzar hasta 66 metros.

Para calcular esta distancia en metros, existe una regla que se ha apodado como la “regla del cuadrado”. Consiste en eliminar el último dígito de la velocidad a la que se circula y multiplicarlo por sí mismo, para saber cuánta distancia dejar. Por ejemplo, si circulas a 60 kilómetros por hora, multiplica 6 por 6 y el resultado, 36, serán los metros que debes dejar con respecto al vehículo anterior. Si las circunstancias son adversas, deja el doble de esta distancia para una mayor seguridad.

¿Existen multas por no respetar la distancia de seguridad?

Como ya sabes, las sanciones están encaminadas a penalizar aquellos comportamientos que conllevan actitudes peligrosas para el resto de personas que circulan por la vía pública. Por lo tanto, es lógico pensar que no mantener la distancia de seguridad debe ser penalizado.

En este caso, la DGT permite sancionar con 200 euros y perder cuatro puntos del carné de conducir en los casos en los que un conductor no respete la distancia de seguridad. Incluso, en casos en los que esta distancia se vea agravada con otras actitudes al volante, la multa puede ascender hasta 500 euros y 6 puntos del carné.

La distancia de seguridad entre vehículos al final es un escudo que evita la colisión por alcances de frenadas repentinas. Ten en cuenta que al año se producen alrededor de 24.000 colisiones de este tipo que pueden ser evitadas con algo tan sencillo como mantener una correcta distancia de seguridad. ¡No lo olvides!